This post is also available in: Català (Catalán) English (Inglés)
En la sesión de trabajo abierta, realizada en Tarragona, el 15 de marzo 2022, por la mañana, vimos el papel de la energía como procomún y en concreto, nos fijamos en la figura de las Comunidades Energéticas Locales (CELs). Organizamos la sesión junto con INSTA y CoopCamp también con ellas redactamos un informe (solo en catalán) para empezar a reflexionar conjuntamente sobre la temática, para recoger el trabajo efectuado ese día y compartirlo, con el ánimo de servir como punto de partida para seguir profundizando en la reflexión.
En la sesión de Tarragona participaron personas de las entidades organizadoras, femProcomuns, INSTA y CoopCamp, así como de los proyectos y entidades invitadas Ajuntament de Pinell de Brai, e-Plural, Som Mobilitat, EPI Energia per la Igualtat, Xarxa per la Sobirania Energètica i l’Aliança contra la Pobresa Energètica, además contribuyeron personas en representación de entidades como la FAVT (Federació d’Associacions de Veïns de Tarragona), Diputació de Tarragona, Grup d’Estudi i Protecció dels Ecosistemes Catalans-Ecologistes de Catalunya (CEPEC-EdC), Associació de Veïns de la Minera de Reus, Som Energia del Baix Penedès, y Tarragona Impulsa. El informe recoge las aportaciones realizadas por todas las participantes.
La energía es un elemento clave de toda organización social. Cómo se produce, transporta, transforma y se utiliza contribuye a modelar el tipo de sociedad y su relación con el entorno natural. La organización mercantilista, oligopólica y guiada por la maximización del lucro privado de la energía ha tenido consecuencias graves para la sostenibilidad ecológica y humana, al tiempo que ha despojado a las comunidades locales de la capacidad para decidir de forma autónoma cómo organizan su actividad productiva y reproductiva, y de controlar y disponer de los recursos esenciales para la vida. Entender la energía como un procomún la sitúa fuera de la lógica mercantil, nos hace pensar en quién la necesita y quién la usa, en tanto que personas con capacidad de auto-organizarse colectivamente para atender a las necesidades de una forma responsable y sostenible.
En 3 grupos, trabajamos tres niveles:
• Qué necesitamos y tenemos a nivel Cataluña
• Qué necesitamos y tenemos en el Camp de Tarragona
• Informe de la Xarxa per la Sobirania Energètica y el modelo del Procomún.
Tomamos en consideración cada uno de los pilares del Modelo de sostenibilidad del procomún y vimos que las CELs se abren como una oportunidad para cambiar el funcionamiento tradicional del modelo energético, permitiendo el empoderamiento ciudadano. Hay un fuerte interés y voluntad de implicación en la construcción de comunidades energéticas en Cataluña, probablemente porque nos sentimos como comunidad de afectados, por la emergencia climática, la emergencia energética y los macroproyectos con fuerte impacto socio ambiental, y queremos ser parte de la solución. Si estas comunidades se constituyen como cooperativas o asociaciones y teniendo en cuenta criterios de soberanía energética, podemos construir una gobernanza democrática y ser una palanca transformadora del actual modelo.
Se ve a venir que este empoderamiento no se va a dar solo en el ámbito de la generación energética, sino que puede incidir en todo el sistema. Esto nos hace pensar que debemos aprovechar las CELs para realizar cambios estructurales.
La sesión evidenció, también, la necesidad de hibridación entre los diferentes actores, con los otros movimientos transformadores como por ejemplo los Grupos locales de Som Energia u otros proyectos cooperativos, asociaciones vecinales, luchas ecologistas, etc. Y concluimos que es difícil analizar las CELs desvinculadas de su entorno, porque la realidad es que las que se están creando tienen, siempre, un sustrato previo sin el cual, no podrían existir.